Este es el sitio poético de Laura Martínez Coronel.

Nazira



Nazira duerme con su enorme cabellera llena de estrellas desatada en el aire

escupiendo su preciosa alma como un cocktail de

afiebrados calamares

La expía de dolores, soledad y culpas que no tiene




Nazira no sabe que la vida es grande, generosa, única

y que es un milagro que solo se le ofrece a los valientes




No sabe que la noche no es sólo un camino de fantasmas y sonámbulos

que apenas se tropiezan con la luna

en una combustión ilógica de golpes y desgarradores gritos de sirena




Ella quiere frotarse la memoria con un párpado enmascarado de musgo

y cae en la carrera brutal en dónde no consigue ahogar sus penas




Nazira no sabe que la noche es también un rico sendero

en dónde crecen obstinados los capullitos de rosa

y los grillos convierten en música de hermosa languidez

las pisadas sangrientas que la llevan de regreso a su casa aunque no quiera




Nazira me deja sus palabras oscuras y tristes

como sus manos desparramadas y locas en la tierra




Su cuerpo es frágil, confuso, ilimitado

hermoso, digno, amable, como ella




La verdad, esa oscura verdad que la trae, aprendiz de mujer

con sus caracoles quebrados y los ojos asustados de su última muñeca

no es tan axiomática ni es un golpe de fuego en su nuca despierta de reina irrepetible




Nazira no es la imagen de una dulce palidez en gris

sobre el piso frío de una madrugada sin ella




No es el golpe brutal de un monstruo informe defensor de un perro famélico

que muerde ciego y sordo la escalera




Es

el sueño espasmódico de un pájaro infinito

unos pequeños pies

un pedido de auxilio al olor de brebaje de madera

la esperanza desnuda de visitar entera otro planeta




Nazira no sabe cuán hermosa es su alma de vida que se estrena




Y cuando abrió los ojos en una noche lluviosa de tanta soledad

con su despeinada cabellera abrigándole los sueños y las lágrimas

los ángeles le prestaban millones de alas para ella




Yo soy un poco sus ojos

sus lágrimas de dolor interminable

su pequeña figurita azotada sin más por los puños de la intolerancia que golpean

A mi me han expulsado ya también, mas de una vez

y me fui a llorar sin testigos por la impunidad gerente de las hienas




Que de estos días sólo quede un jirón de lo que ya no duela

que su piel se abra a una caricia capaz de amar su corazón

y libere sus horas de la ausencia de faros que no encuentra




Nazira no sabe cuán hermosa y cierta es su sonrisa

de mariposa aventurera.




- - -
De "En la piel de un relámpago" (2002)



* * *


(Imagen: Emiliano Di Cavalcantti, Brasil)

1 comentario:

  1. Azarela García
    Poesía o texto universal, doliente, verdadero

    ResponderEliminar

Rogamos identificarse con nombre y apellido. De lo contrario, se eliminará el mensaje.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...